El misterio de los peces tóxicos de los calusa: un enigma arqueológico

Los calusa, una antigua tribu de Florida, capturaban peces erizo tóxicos con fines desconocidos. Hallazgos en Mound Key revelan restos masivos de estas especies, que producían un veneno mortal. Científicos investigan posibles usos rituales, medicinales o como herramientas, destacando el ingenio de esta fascinante civilización.

florida

La tribu calusa, un antiguo pueblo nativo americano que habitó las costas de la actual Florida en tiempos precolombinos, ha vuelto a capturar la atención de los investigadores por una enigmática práctica: la captura masiva de peces tóxicos que no eran consumibles por los humanos. Este comportamiento, documentado en un reciente artículo publicado en el Journal of Anthropological Archaeology por Isabelle Holland-Lulewicz, antropóloga de la Universidad Estatal de Pensilvania, plantea preguntas fascinantes sobre la cultura y la adaptación de este pueblo.

Hallazgos arqueológicos en Mound Key

En el yacimiento de Mound Key, ubicado en el suroeste de Florida, los arqueólogos han descubierto grandes cantidades de restos óseos de peces erizo (Chilomycterus schoepfii) y otras especies del género Diodon, pertenecientes a la familia Diodontidae. Estos peces son conocidos por producir tetrodotoxina, un veneno extremadamente letal que puede causar parálisis, insuficiencia respiratoria e incluso la muerte en cuestión de horas.

Aunque restos de peces erizo se han encontrado en otros sitios arqueológicos de América del Norte, del Sur y el Caribe, la concentración masiva hallada en Mound Key es única. Esto ha llevado a los científicos a preguntarse qué uso podría haber dado este pueblo a los peces tóxicos.

La sofisticada cultura calusa

Los calusa emergieron como una tribu distinta alrededor del año 500 d. C. Su sociedad, basada en la pesca y la caza, alcanzó su apogeo entre los siglos IX y XV d. C. Según las crónicas españolas, los calusa eran un pueblo sofisticado con estructuras sociales complejas. Sin embargo, al igual que muchas otras civilizaciones nativas, sucumbieron a la conquista española. Para el siglo XVIII, habían desaparecido como grupo identitario, en parte debido a enfermedades europeas y procesos de asimilación.

Un episodio emblemático de su resistencia fue el enfrentamiento con el conquistador español Juan Ponce de León. En 1521, una flecha lanzada por un calusa hirió mortalmente al explorador, quien había sido el primer europeo en avistar Florida en 1513.

Hipótesis sobre los peces erizo

Isabelle Holland-Lulewicz menciona que, si bien las crónicas españolas describen algunos usos visibles de los peces erizo en otras culturas, como los cascos de guerra melanesios, no se han identificado descripciones equivalentes en los registros sobre los calusa. Sin embargo, los arqueólogos especulan sobre varios posibles propósitos:

  • Uso medicinal o ritual: La tetrodotoxina podría haber sido empleada en ceremonias o para inducir estados alterados de conciencia.
  • Fabricación de herramientas: Las espinas de los peces podrían servir como puntas de flecha, lanzas, o incluso para realizar tatuajes o sangrías.
  • Armas y defensas: Las propiedades venenosas de los peces tal vez fueron utilizadas para envenenar puntas de proyectiles.

A pesar de estas teorías, los científicos aún no han hallado pruebas concluyentes sobre cómo los calusa empleaban estos peces.

Un misterio sin resolver

El caso de los peces erizo en Mound Key subraya la complejidad y el ingenio de los calusa, un pueblo que supo adaptarse y prosperar en un entorno rico pero desafiante. Este enigma arqueológico no solo ofrece un vistazo a sus vidas, sino que también desafía a los investigadores a seguir desentrañando los secretos de una civilización perdida.

En palabras de Holland-Lulewicz: “El registro etnográfico mundial contiene referencias a usos notorios de los peces erizo, pero queda mucho por descubrir sobre las prácticas específicas de los calusa.” Por ahora, el misterio de los peces tóxicos sigue siendo una de las tantas preguntas sin responder de este fascinante pueblo.

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